El proyecto a desarrollar en este tercer ejercicio comenzaba con la propuesta de aislar acústicamente la nave con el fin de permitir desarrollar otras actividades en los espacios directamente anexos a ella con unas condiciones sonoras adecuadas. Sin embargo la propuesta de los profesores de llevar el tema de la adecuación acústica a un espacio de una escala más reducida y manejable junto con el interés del grupo de la CIGARRA ELÉCTRICA por adecuar acústicamente su lugar de ensayo, nos hizo ponernos en contacto con ellos y encaminar nuestra actuación hacia una escala más doméstica.
Después de ver en la situación en la que se encontraba el espacio a tratar, ubicado en las naves anexas a la tapia del patio exterior, decidimos tomar las siguientes decisiones de proyecto:
- evitar los ángulos rectos o menores de 90º en los que se generan nudos de graves.
- evitar los paralelismos, tanto en el plano horizontal (suelo-techo) como en el vertical (paredes) que produjesen la potenciación indeseada de frecuencias o su completa anulación.
- evitar las paredes desnudas que reflejan en un alto porcentaje las ondas sonoras.
Respecto al plano vertical, proponemos una serie de pantallas sonoras, a base de tubos de cartón forrados de moqueta de distintos colores, con las que crear un subespacio dentro del propio local. De esta manera conseguimos, además, crear un límite entre la zona de ensayo y el espacio en el que se dispone y baila el publico asistente a éste. En cuanto al plano horizontal, se plante crear un falso techo con una geometría que actúa de difusor del sonido y de la reverberación excesiva, al mismo tiempo que reduce el volumen del espacio de ensayo.
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